¡No Pueden Estar Hablando En Serio! ¡La Peor Misión Sigilosa De La Historia!

Hoy hay muchas novedades interesantes desde la dirección de Lyman.

Aquí, las tropas rusas cerca de Lyman se encuentran cada vez más desesperadas por evadir la creciente red de drones térmicos ucranianos, los cuales detectan sus movimientos e intentos de infiltración a cada paso. Su último intento de ocultamiento fue tan rudimentario, improvisado e increíble que terminó exactamente como cabía esperar.

El objetivo de las fuerzas rusas en esta zona es tomar la ciudad de Limán para eliminar el control ucraniano al este de los ríos Donets y Oskil, y facilitar futuras operaciones más grandes en la toma del Donbás. En el flanco norte, los rusos están intentando expandir su presencia sobre el río Zherebets. Mientras tanto, al sur, se encuentran atascados en el bosque de Serebryanski debido a una densa red de búnkeres ucranianos. Sin embargo, en el centro, la 60.ª brigada mecanizada ha mantenido la línea durante los últimos dos años, mientras los rusos intentan romperla desesperadamente para avanzar directamente sobre Limán.

Para mantener la defensa, los soldados de la 60.ª brigada mecanizada utilizaron técnicas de minado remoto para dispersar minas en las rutas de avance rusas, complicando gravemente su logística y desbaratando los asaltos mecanizados antes de que alcanzaran las líneas ucranianas.

Además, incursiones llevadas a cabo por unidades de infantería de élite, en combinación con reconocimiento mediante drones, permiten a los ucranianos detectar y eliminar a fuerzas rusas en redes de trincheras fortificadas que se preparan para asaltos. Por eso, los rusos están recurriendo a pequeños grupos de asalto de infantería que intentan infiltrarse por bosques, áreas arboladas y asentamientos, dificultando su detección.

Para contrarrestar esto, las fuerzas ucranianas utilizan drones equipados con cámaras infrarrojas y térmicas para detectar movimientos rusos mediante firmas de calor, incluso a través de la cubierta forestal y el camuflaje natural, lo que les otorga una ventaja significativa en tareas de reconocimiento. Estos drones son efectivos tanto de día como de noche, anulando los intentos convencionales de ocultamiento ruso.

A pesar de los esfuerzos rusos por usar mantas térmicas o trajes especiales para camuflar sus firmas térmicas, los drones ucranianos han demostrado ser capaces de identificar y atacar a estos soldados ocultos igualmente. Aunque estas capas reducen la firma térmica, las siluetas de los “puntos fríos” aún son visibles, permitiendo su detección si los operadores ucranianos logran identificarlos a tiempo.

Estas contramedidas son eficaces, pero dado que la mayoría de las unidades rusas no cuentan con ese equipo, los soldados tuvieron que recurrir a métodos desesperados e inusuales para infiltrarse sin ser detectados.

Algunos soldados rusos tomaron medidas extremas, camuflándose con simples bolsas de basura, lo cual fue una receta para el desastre. En la línea del frente, especialmente en las zonas de trincheras densas, es común encontrar basura esparcida usada por soldados de ambos bandos. Sin embargo, bolsas de basura del tamaño de una persona caminando por campo abierto llamaron inmediatamente la atención de los operadores de drones ucranianos. Además, las bolsas cegaban por completo a los soldados rusos, que no sabían que ya habían sido detectados por drones, ni que drones FPV ucranianos se aproximaban rápidamente, matándolos casi al instante.

Desafortunadamente para los rusos, la detección y posterior eliminación de estos dos soldados alertó correctamente a los ucranianos sobre posibles nuevos asaltos en la zona. Los drones ucranianos despegaron y detectaron fácilmente a los soldados rusos virtualmente ciegos, escondidos bajo plásticos. Sordos ante los drones que zumbaban sobre ellos, fueron blancos fáciles de granadas lanzadas desde el aire.

Al final, la 60.ª brigada mecanizada detectó y eliminó a 14 soldados rusos con bolsas de basura en los campos y áreas boscosas, siendo este otro intento fallido más de los rusos.

En resumen, el uso de drones con imagen térmica por parte de Ucrania obligó a los soldados rusos a recurrir a las medidas más desesperadas, como cubrirse con bolsas de basura para intentar cruzar la zona gris sin ser vistos y atacar posiciones ucranianas.

Sin embargo, su intento de ocultamiento se convirtió rápidamente en un desastre, ya que los ucranianos consideraron sospechosas las bolsas de basura andantes, los localizaron y neutralizaron, y detectaron a más grupos de asalto que se acercaban. Con la 60.ª brigada mecanizada manteniendo firmemente la línea, los rusos se ven forzados a continuar sus ataques en zonas con líneas de suministro sobreextendidas o bosques llenos de búnkeres ucranianos ocultos.