Hoy hablaremos de los desarrollos más interesantes a lo largo de la línea del frente, centrándonos en las zonas de Kursk, Lyman-Borova, Pokrovsk-Kostiantynivka y Velyka Novosilka.

En el sector de Kursk, las fuerzas ucranianas han continuado su estrategia de desgaste deliberado seguido de contraataques dirigidos, aplicando una presión constante sobre las unidades rusas en avance. Después de debilitar las posiciones rusas con una serie de ataques aéreos precisos contra concentraciones de tropas, artillería y depósitos de municiones, las fuerzas ucranianas lanzaron una serie de contraataques multidireccionales. Estos esfuerzos llevaron a la recuperación de Andriivka, partes de otros asentamientos cercanos y un bosque de importancia táctica justo al otro lado de la frontera, en territorio ruso.

Los contraataques se llevaron a cabo mediante una combinación de infantería y blindados, incluyendo una exitosa incursión de tanques dirigida a interrumpir las unidades rusas en la retaguardia. Las unidades ucranianas aprovecharon la sobreextensión rusa y la falta de personal, golpeando después de que los rusos hubieran comprometido significativamente sus fuerzas en ataques anteriores. Como en enfrentamientos anteriores, esta táctica ha obligado al mando ruso a desviar continuamente refuerzos hacia posiciones ya agotadas.

Como resultado, el ritmo de la ofensiva rusa en la región de Sumy ha disminuido visiblemente en los últimos días. Las fuerzas ucranianas siguen comprometidas en mantener este ritmo, explotando cada revés ruso para recuperar terreno y negar al enemigo el impulso operativo.

En el sector de Lyman-Borova, las fuerzas ucranianas están atacando activamente el puente ruso sobre el río Zherebets desde múltiples direcciones. La Tercera Brigada de Asalto del Tercer Cuerpo de Ejército de Ucrania avanza desde el norte, mientras que se espera que las unidades estacionadas en Lyman ejerzan presión desde el sur. Esta táctica de pinza está ejerciendo una presión considerable sobre las tropas rusas, ya sobrecargadas y operando más allá de sus límites logísticos. Un ejemplo evidente es la destrucción por parte de Ucrania de un sistema ruso de cohetes Grad que había sido desplazado hasta el río Zherebets para apoyar a las unidades rusas más adelantadas.

En lugar de comprometerse con una operación a gran escala para expulsar a las fuerzas rusas, los comandantes ucranianos parecen satisfechos con realizar ataques limitados centrados en eliminar posiciones vulnerables en operaciones de bajo riesgo y alta recompensa. Al explotar la sobreextensión enemiga, las fuerzas ucranianas infligen pérdidas constantes en personal y equipo, manteniendo al mismo tiempo su flexibilidad operativa. Las tropas rusas que avanzan sin suficiente apoyo están siendo desgastadas por la presión continua de drones y artillería ucranianos. Esta estrategia permite al mando ucraniano gestionar eficazmente la línea del frente sin comprometer recursos excesivos, inclinando gradualmente la situación a su favor.

En el sector Pokrovsk–Kostiantynivka, las defensas ucranianas siguen intactas mientras las fuerzas rusas luchan por lograr avances significativos. La actividad reciente ha consistido principalmente en la consolidación de control sobre la zona gris previamente disputada, sin que se hayan logrado avances territoriales de importancia. Tras el fracaso de un gran asalto mecanizado sobre Kostiantynivka, que resultó en enormes pérdidas, las fuerzas rusas parecen estar desplazando su enfoque hacia los accesos orientales de Pokrovsk con la esperanza de explotar un flanco más débil.

Sin embargo, las fuerzas ucranianas han establecido una línea defensiva bien preparada que permanece fuera del alcance de las unidades rusas. A pesar de los intentos repetidos, las tropas rusas aún no han logrado siquiera alcanzar esta línea fortificada. Los operadores de drones ucranianos desempeñan un papel crucial para frenar el avance ruso, atacando continuamente las rutas de suministro y los grupos de asalto con gran precisión.

El terreno abierto y las defensas escalonadas de Ucrania dificultan aún más cualquier avance, y las fuerzas rusas ya han sufrido pérdidas considerables. Cualquier nuevo intento de avanzar hacia la línea defensiva probablemente provocará aún más bajas, mientras que la artillería y los drones ucranianos mantienen la superioridad operativa en todo el sector.

Pasando a la dirección de Velyka Novosilka, las fuerzas rusas intentaron explotar una brecha en las líneas ucranianas, tratando de capitalizar la desventaja de personal ucraniano en este sector. Sin embargo, los operadores de drones ucranianos reaccionaron rápidamente, atacando activamente los movimientos de infantería enemiga y frenando el impulso inicial ruso.
Además de los esfuerzos en el frente, las fuerzas ucranianas atacaron un puente en la retaguardia rusa. Aunque este puente no sea un punto de cruce principal, su destrucción reduce las rutas logísticas disponibles para los rusos, haciendo que sus movimientos de suministros sean más predecibles. Esta mayor previsibilidad permite a las fuerzas ucranianas rastrear y atacar con mayor facilidad la logística rusa, como lo demuestra un video recientemente publicado que muestra un exitoso ataque a un depósito de municiones ruso en Velyka Novosilka.

A pesar del empuje ruso localizado, las unidades ucranianas parecen bien posicionadas para contener la amenaza y ya están trabajando para impedir nuevas explotaciones. La situación sigue siendo dinámica, pero la respuesta ucraniana ha sido rápida y coordinada, reduciendo el riesgo de una penetración más profunda.

En resumen, en Kursk, las fuerzas ucranianas lanzaron varias incursiones para desviar la atención rusa y detener su ofensiva contra Sumy.

Mientras tanto, cerca de Lyman-Borova, unidades ucranianas con experiencia están atacando el puente ruso a través del río y explotando los problemas logísticos y la falta de apoyo de las fuerzas enemigas.

Cerca de Pokrovsk-Kostiantynivka, a pesar de lanzar un ataque masivo, los rusos no han logrado penetrar las bien estructuradas líneas defensivas ucranianas.

Al norte de Velyka Novosilka, los ucranianos evitaron un avance ruso mayor atacando las líneas de comunicación terrestre del enemigo.

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